Libertad, Autonomía y Heteronomía

Es muy común oír a los jóvenes decir que no tienen "libertad". Cuando hablamos de libertad, no solo tiene que ver con uno mismo, si no con varias personas con las que nos relacionamos.

La Libertad es la "facultad natural que tiene el hombre de obrar de una manera u otra, y de no obrar, por lo que es responsable de sus actos".

En esta definición hay varias implicaciones:

• FACULTAD NATURAL: es algo propio, que nos pertenece.
• QUE TIENE EL HOMBRE: que es propia de los humanos, es decir, los animales no la poseen.
• DE OBRAR DE UNA MANERA U OTRA: que podemos elegir ante cualquier posibilidad o problema que se nos presente.
• Y DE NO OBRAR: dentro de esas elecciones, se puede no elegir nada
• POR LO QUE ES RESPONSABLE DE SUS ACTOS: la responsabilidad es una consecuencia inevitable de la libertad, debemos asumir las consecuencias.

El hecho de que nosotros, los seres humanos, seamos libres conlleva otras implicaciones filosóficas más profundas. Por ejemplo, los humanos somos capaces de auto-determinarnos, de construirnos a base de experiencias. También se implica que al poder elegir nuestras acciones, se nos presenta la angustia de por cuál de estas optar. La libertad es una característica moral de las personas, ligada a su racionalidad, es decir, la capacidad de elección moral para imponer una norma por sobre sus afecciones, inclinaciones o deseos. La libertad es uno de los mayores atributos de la humanidad y uno de los postulados de la razón práctica. Damos por hecho que existe esta libertad, o la ética no sería posible, pues solo nos encontraríamos teorías deterministas del comportamiento humano. Si no podemos elegir, no hay autonomía ni ética posible.

Existen corrientes de pensamiento que niegan la libertad, y se asume que las acciones de las personas están sometidas a leyes o voluntades ajenas a la nuestra; tal es el caso de la escuela Estoica, o bien, ciertas doctrinas religiosas. Estas líneas de pensamiento asumen lo que se denomina determinismo, o sea, asumir que todo está determinado y que no hay libertad para elegir.

Existen algunos factores externos que pueden limitar, condicionar o anular nuestra libertad: 

• La ignorancia
• El miedo
• Cólera y otras pasiones
• Violencia
• Obstáculos psíquicos

Cuando optamos por algo de manera libre y consciente, o de hacer o no algo, estamos asumiendo una responsabilidad, es decir, cada elección traerá una serie de consecuencias que debemos asumir. Por ello, es necesario analizar las implicaciones que conlleva una elección y estar preparados para asumir lo que dicha elección derive.